Invitado por el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales
(Clacso), la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso-
Brasil), la Asociación Nacional de Posgrado e Investigación en Educación
(Anped) de Brasil, el Laboratorio de Políticas Públicas, el Foro
Latinoamericano de Políticas Educativas-Flape y la Red Latinoamericana
de Estudios sobre Trabajo Docente (Red Estrado), asistí a la 36 Reunión
Nacional de la Anped y al 16 Coloquio Clacso–Flacso–Anped, que se
realizó en el Campus de la Universidad Federal del Estado de Goiás,
Brasil, ubicada en la ciudad de Goiania, capital del Estado de Goiás,
entre el 29 de septiembre y el 2 de octubre pasado.
Fui con el propósito de presentar una ponencia en el Coloquio
Internacional sobre Políticas para la Inclusión en Educación Básica en
contextos de desigualdad, tal es el caso, desgraciadamente
paradigmático, de nuestro empobrecido país.
Mi contacto con la investigación brasileña se remonta a hace casi
treinta años, cuando en 1984, en compañía de Rogelio Ramírez Mercado,
asistimos al XVI Congreso de la Asociación Latinoamericana de Sociología
(Alas), que se realizara en la Universidad Federal del Estado de Río de
Janeiro. De esos días recuerdo que en uno de los auditorios de esta
Universidad, como parte de un gigantesco mural, se leía esta sentencia
radical y terminante: “En esta Universidad, el profesor que no investiga
no tiene derecho a enseñar”.
Aquel mandato estudiantil marcó para siempre mi vida como profesor
universitario, y suponemos hoy, por la época en que fue escrito, el
mismo era parte del movimiento científico, que en esos años diera origen
a la fundación de la Asociación Nacional de Posgrado e Investigación
Educativa (Anped).
Para nosotros, asistir al XXXVI Congreso de la Anped, tenía un doble
propósito, por un lado, aprender tomando contacto desde adentro con una
de las mejores investigaciones educativas del continente, y por el
otro, ofrecer testimonio de primera mano, ante un sector de la comunidad
de investigadores brasileños, sobre las perversas consecuencias del
neoliberalismo en el campo de la educación, tal fue el caso de Nicaragua
con la implantación del modelo de privatización de la educación
conocido como Autonomía Escolar, y en el polo opuesto, sobre los
denodados esfuerzos que en la actualidad realiza el gobierno del
presidente Daniel Ortega para dar respuesta a tanta pobreza y tanta
desigualdad social, odiosa síntesis del legado capitalista en nuestro
país.
La Anped es una Asociación fundada en 1977, que agremia a todos los
programas de Posgrado, profesores y estudiantes vinculados a los mismos e
investigadores e investigadoras del campo de la educación en Brasil. Su
visión está relacionada con una educación pública democrática y de
calidad para todos y todas en Brasil, de ahí que sus actividades
compartan el mismo escenario de lucha de las Asociaciones sindicales del
magisterio brasileño, la Red Estrado, Clacso, Flacso y la Campaña
Brasileña y Mundial por el Derecho de la Educación, y de que el tema
general del 36 Congreso de la Anped haya sido el Sistema Nacional de
Educación y Participación Popular: desafíos para las Políticas
Educacionales.
Con la participación de alrededor de 3500 profesores y estudiantes de
los 148 Programas de Posgrado (Maestrías y Doctorados) en educación del
Brasil e investigadores del campo de la educación, el 36 Congreso de la
Anped incluyó una amplia gama de aspectos y temas en los campos del
Currículum, las Políticas Educativas, Historia, Filosofía, Planificación
y Sociología de la Educación, Formación del profesorado, Educación de
Adultos, Educación Especial, Educación Parvularia y Superior, las Nuevas
Tecnologías y la Didáctica, y una treintena de aspectos más.
En el entorno de los debates del Congreso propiamente dicho, una
Feria del libro brasileño sobre educación, Festivales de cine, teatro,
danza, mesas redondas, conciertos, coloquios, conferencias,
premiaciones, toda una fiesta de la educación y su investigación puesta
al servicio de los pobres, en el contexto de una Universidad como para
tener cuarenta años menos, y un Brasil campeón mundial hoy de la lucha
contra la pobreza, y líder de la dignidad de los pueblos oprimidos, como
diría Paulo Freire o Darcy Ribeiro frente a la prepotencia del imperio.
* Sociólogo. Profesor UNAN-Managua.
migueldecastilla68@hotmail.com