martes, 28 de julio de 2015

La Calidad de la Educación en Congreso

En Nicaragua, el mecanismo de educación política y de consulta de los trabajadores del Estado y de los sectores sociales relacionados con el perfil de cada institución gubernamental es el del congreso. Por ello, el gobierno sandinista en este mes de julio está convocando y organizando un conjunto de congresos tanto en el campo educativo como en otros relacionados con la educación técnica y tecnológica, la economía familiar, el turismo, las tecnologías agropecuarias, las pequeñas y medianas empresas, etc.

En este contexto, el pasado 15 de julio, en saludo al héroe sandinista Julio Buitrago Urroz y al 36 aniversario del triunfo de la Revolución y con la participación de 544 estudiantes, maestros, funcionarios, padres y madres de familia, se realizó en el Recinto Universitario Rubén Darío, de la UNAN-Managua, el Primer Congreso Nacional de Educación “Vamos Adelante”.

El congreso fue presidido por la Dirección Superior del Mined y organizado con base en catorce mesas de trabajo para el estudio de igual número de rutas de política educativa, las que arbitrariamente podrían agruparse en tres conjuntos sistémicos y llamarse así: Poblaciones Metas: Educación Preescolar/Primera Infancia; Educación Multigrado; Educación Continua de Primer a Tercer Grado; Educación Especial Incluyente; Educación Secundaria a Distancia; Post-Alfabetización. Fines de la Educación: Educación en Valores para una Vida Armoniosa, Bonita y Sana; Arte, Cultura, Identidad/Tradición; Historia para las Nuevas Generaciones. Medios para alcanzar Fines: Formación Docente; Tecnologías Educativas/Laboratorios;  Inglés como segunda lengua; Deporte Escolar; Respaldó en todas las Rutas, Canal 6 como televisión Educativa Nacional.

Como es posible observar el conjunto de rutas sobre las Poblaciones Metas, se refiere a dos tipos de poblaciones: la niñez entre cero y ocho años de edad, especialmente la niñez que asiste a los preescolares comunitarios y a las escuelas multigrados y a la población rural de la secundaria en el campo y a la posalfabetización. En suma, la población ubicada en el escalón más bajo de la estructura social de clases del país. Eso explica cuál es el segmento poblacional objetivo del gobierno nicaragüense en la actualidad y su vocación y principal preocupación en la batalla contra de las matrices donde se incuba la pobreza.

El conjunto sobre los Fines de la Educación está referido al campo de lo axiológico, cultural e histórico, camino a la forja de una cultura nacional preñada de valores para el buen vivir nicaragüense y el conjunto sobre los medios se refiere a mecanismos y procedimientos sobre cómo alcanzar estos, formando y capacitando docentes, a través del deporte escolar, las nuevas tecnologías de la información y la comunicación y la televisión educativa.

El congreso fue concebido no como el punto de partida de una actividad que debiera realizarse en el futuro, sino como un momento de un proceso de largo plazo, cuya función fue evaluar lo realizado en cada una de las rutas y sentar las bases para el futuro, tomando en cuenta que cada ruta tiene su propio sentido, sus propios objetivos y actividades, las que son evaluadas semanalmente.

Un hecho sobresaliente de esta nueva manera de ser de la educación nacional, es que en el congreso y en el proceso de ejecución de los planes de cada ruta, participan de manera articulada, los representantes de los subsistemas del sistema educativo nacional, en especial el de la educación superior y la educación básica y media y todos los actores de la comunidad educativa nacional.

En el futuro cuando el debate se amplíe y profundice, seguramente aparecerán nuevas rutas que permitan avanzar en la tarea de transformar la educación nicaragüense cara al porvenir. Por ejemplo, si se trata de pensar a Nicaragua como una sociedad  de innovadores, científicos e ingenieros, la inclusión de rutas orientadas a reflexionar sobre la enseñanza aprendizaje de las matemáticas y las ciencias naturales (física y química) en la educación general básica y media, será fundamental, igual será la necesidad de la evaluación de los aprendizajes y de la calidad de la educación.


Un hecho relevante en este Primer Congreso Nacional de Educación fue su carácter promotor de la forja de una conciencia política comprometida con la elevación de la calidad de la educación de parte de la comunidad de estudiantes, maestros, directivos del sistema educativo nacional, padres de familia y comunicadores sociales. Conciencia, tierra fértil, hambre de saberes para que el paso siguiente sea la formación, la capacitación y el aprendizaje de nuevas metodologías y nuevas formas y maneras de pensar y hacer la educación.

viernes, 17 de julio de 2015

Sobre el financiamiento a la educación nicaragüense

El financiamiento gubernamental a la educación se ha transformado en el centro de todas las preocupaciones de las organizaciones y medios de prensa opositores al gobierno sandinista, cuando de tratar el tema educativo del país se trata. Es algo tan obsesivo, que tal pareciera que la problemática educativa nacional se redujera a una cuestión de pesos y centavos, tal que si se aumenta el presupuesto para la educación, automáticamente, como por arte de magia, todo encontraría arreglo y solución.
Sobre este tema hay varios mitos, mentiras y verdades que conviene aclarar.
Dinero para la educación vs. políticas educativas: ¿Qué es primero? Obviamente que lo primero son las políticas, es decir en qué temas, aspectos, áreas o problemas invertir, tomando en cuenta el amplio universo de la educación. Pero no basta hacer un listado de temas o áreas problémicas. Hay que jerarquizarlas por orden de importancia y prelación. Hay que convertirlas en sistema, según el cual, todas las políticas según los temas interactúan entre sí. Esto es fundamental para establecer presupuestos en el terreno educativo, en tanto el financiamiento de una política puede hacer nodo con el financiamiento de otra política contigua y así optimizar recursos. Entonces si esto parece lógico, ¿por qué poner, insistentemente los bueyes delante de la carreta? La única explicación es porque el tema del dinero público no es técnico, ni metodológico, sino que es político. 
¿El 7%, o el 6% o el 15% del Producto Interno Bruto para la educación? Ni lo uno, ni lo otro, ni el otro. Todo va a depender del tamaño y profundidad del problema a atender en cada política y si el área problemática recibe financiamiento de parte de otros ministerios o instituciones. Estos son los casos, por ejemplo, de la Política de Primera Infancia que es atendida sistémicamente por los ministerios de Educación, Salud y de la Familia, o el caso del Programa de Alimentación Escolar, que igual es parte de la Política de Soberanía Alimentaria y Nutricional del país en la que participan varios ministerios. 
¿El presupuesto para la educación es solamente el que aparece en el libro del Presupuesto General de la República? No. Eso refleja una concepción escolarizada y reduccionista de la educación, impidiendo observar a esta de manera holística, integral y compleja, dejando por fuera a todos los actores de la educación, especialmente a las familias de donde proceden los estudiantes. Excluyendo también otras formas y maneras de organización del Estado y del ejercicio del Poder y de las relaciones entre los seres humanos, cruzadas por el valor de la solidaridad, un comportamiento social que no tiene precio, ni se vende en el mercado.
Nicaragua, durante la Revolución Sandinista y en la actualidad, tanto en términos sociales como institucionales, es un claro ejemplo de esto. En los años ochenta la Cruzada Nacional de Alfabetización, habría costado tres veces más de lo que costó, si no hubiese sido por la solidaridad de tanto joven alfabetizador y sus familias. Los programas emblemáticos del Gobierno sandinista en la actualidad orientados a las familias empobrecidas, especialmente a las mujeres y a las madres solteras, tales como Casas para el Pueblo, Hambre Cero, Usura Cero, Alfabetización de Adultos y Cooperativas de Producción para Artesanas, son programas con profundas implicancias y consecuencias en la educación de la niñez y la juventud empobrecida de este país, no solo en términos de su acceso y permanencia en la matrícula escolar, sino que también en los procesos de socialización en los valores familiares tan necesarios en los procesos educativos.
La participación de las alcaldías en apoyo a la reparación y construcción de escuelas en las zonas rurales y la donación de infraestructura informática a los centros de estudio, así como el apoyo de las facultades de educación de las universidades públicas a elevar la calidad de la educación, expresan procesos de articulación y unidad en la acción, entre instituciones públicas con orientación a una misma meta y finalidad en el terreno educativo.

Todos estos hechos y otros que podrían mencionarse, indican un enmadejamiento de “vigores dispersos” alrededor de la distribución de cargas financieras de la obra educativa de la revolución, que rebasa la insistencia enfermiza de más presupuesto para la educación, de algunos sectores, como si el financiamiento de esta solo dependiese del Presupuesto General de la República.

viernes, 3 de julio de 2015

De Dakar a Incheon, los nuevos objetivos de la Educación

Los propósitos del Foro Mundial sobre la Educación, realizado en Incheon, República de Corea, entre el 19 y el 22 de mayo pasado, fueron dos, por un lado debatir las evaluaciones, región por región y a nivel planetario, acerca de los resultados de la puesta en práctica de los seis objetivos para la educación de Dakar-Senegal, previstos en el año 2000, para el período 2000-2015, y dar a conocer, después de un largo período de reflexión y estudio, los nuevos objetivos de la educación para el período 2015-2030 para todos los países del mundo.
Respecto a los resultados del período 2000-2015, Aaron Benevot elaboró una síntesis para las Comisiones Nacionales de Cooperación con la Unesco.  Algunos aspectos que aborda Benevot son los siguientes: hay mucho progreso educativo que celebrar en este año 2015 en tanto hay 84 millones de niños y adolescentes nuevos en las escuelas y de estos 52 millones son niñas; doce millones de maestros han sido reclutados y 34 millones asisten a clases gracias a la influencia del movimiento EPT.   
No obstante, en el mundo hay muchas deudas pendientes en los campos de la educación, dado que solo un tercio de los países alcanzaron los objetivos cuantificables de la EPT. En América Latina y el Caribe, solo Cuba logró alcanzarlos. Ciento veintiún millones de niños y niñas quedaron fuera de los sistemas escolares en el año 2012 y un tercio de los países no alcanzó la igualdad de género en la educación primaria.  Respecto al papel de la educación formal en los procesos de reproducción social de la formación capitalista a nivel mundial, persisten, se amplían y profundizan las desigualdades en educación. Los niños pobres y los más pobres entre los pobres tienen mayores probabilidades de estar fuera de la escuela y de no terminar la escuela primaria, que los niños hijos de familias ricas y acomodadas. Las brechas de aprendizaje, según origen social de clase, son cada día más pronunciadas y cerca de dos tercios de los 781 millones de adultos con conocimientos mínimos de alfabetización, son mujeres.
Respecto al financiamiento de la educación, la mitad de los países de bajos ingresos gasta menos del 4 por ciento del Producto Interno Bruto en educación.  El apoyo a la educación de parte de los organismos donantes se redujo en 1,300 millones de dólares entre 2010 y 2012 y solo el 2 por ciento de la ayuda se orienta a la educación primaria.
Con estos antecedentes del período 2000-2015, los Objetivos de la educación para el período 2015-2030, anunciados en el Marco de Acción, Educación 2030 de la Unesco, son los siguientes:
Para 2030, velar porque todas las niñas y todos los niños tengan una enseñanza primaria y secundaria completa, gratuita, equitativa y de calidad que produzca resultados de aprendizajes pertinentes y efectivos.
Para 2030, velar porque todas las niñas y todos los niños tengan acceso a servicios de calidad en materia de atención y desarrollo en la primera infancia y enseñanza preescolar, a fin de que estén preparados para la enseñanza  primaria.
Para 2030, asegurar el acceso en condiciones de igualdad para todos los hombres y las mujeres a la formación técnica, profesional y superior de calidad, incluida la enseñanza universitaria.
Para 2030, aumentar en un (x) % el número de jóvenes y adultos que tienen las competencias necesarias, en particular técnicas y profesionales, para acceder al empleo, el trabajo decente y el emprendimiento.
Para 2030, eliminar las disparidades de género en la educación y garantizar el acceso en condiciones de igualdad de las personas vulnerables, incluidas las personas con discapacidad, los pueblos indígenas y los niños en situaciones de vulnerabilidad, a todos los niveles de la enseñanza y la formación profesional.
Para 2030, garantizar que todos los jóvenes y al menos el (x) % de los adultos, tanto hombres como mujeres, tengan competencias de lectura, escritura y aritmética.

Para 2030, garantizar que todos los estudiantes adquieran los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para promover el desarrollo sostenible, los derechos humanos, la igualdad entre los géneros, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y de la contribución de una cultura sostenible, entre otros medios.