viernes, 21 de noviembre de 2014

La Primaria en el programa Educación Para Todos

La meta No. 2 de la Educación Para Todos (EPT), propone a los Estados “velar que antes del año 2015, todos los niños y niñas, tengan acceso a una enseñanza primaria gratuita y obligatoria de buena calidad y que la terminen”.
Hablando de derechos humanos y de su relación con la educación, la Educación Primaria es la primera de las educaciones, que va a aparecer en los textos de los grandes acuerdos internacionales, en especial en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Después en la mayoría de las Constituciones Políticas, la Educación Primaria aparecerá como derecho de los ciudadanos y como obligación de los Estados, y en el año 2000, cuando Naciones Unidas aprobó los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), el objetivo No. 2 estará referido a la Educación Primaria y cuando se formulan las metas de la EPT en Dakar ese año, la meta número dos será la referida a la Educación Primaria gratuita y obligatoria.
Para la UNESCO, “el derecho a la educación apunta al desarrollo de las habilidades, conocimientos, valores y actitudes que permitan a todas las personas desarrollarse y vivir de manera digna, tomar decisiones informadas para mejorar su calidad de vida y la de la sociedad, participar en las decisiones colectivas. Durante este período escolar se asienta la capacidad de socialización con diversas personas, se forma la identidad y se construye la autoestima”.
A pocos días del año 2015, ¿Cuál es la síntesis conclusiva sobre los avances y deudas respecto a la meta referida a la Educación Primaria en América Latina y el Caribe? La respuesta de UNESCO a esta interrogante se refiere a diferentes temas, a saber: la evolución de la matrícula escolar en los países de la región en el período 2000- 2014; la fluidez del tránsito de la matrícula escolar de un grado a otro; la evolución del abandono y la retención escolar; las tasas de conclusión de la educación primaria y las formas cómo cada una de estas variables se comportan según los tipos de poblaciones indígenas, afrodescendientes y poblaciones no indígenas.
Acerca de la matrícula, los datos de la región dicen de un “leve” retroceso de un 94 por ciento en el año 2000 al 93 por ciento en el año 2012. No obstante, esta diferencia tiene diferentes matices y expresiones según países, en tanto, en algunos de ellos, los que mayor rezago histórico tenían, hicieron importantes avances en este campo, mientras en otros, la matrícula disminuyó sensiblemente. En el año 2012, la tasa de repitencia fue del 4.9 por ciento en el conjunto de los países de América Latina y el Caribe, en el año 2000 había sido del 6.2 por ciento. Respecto al abandono escolar, este disminuyó del 13 por ciento a 8.3 por ciento.
Las causas acerca del porqué la mayoría de los países de la región no logrará alcanzar la segunda meta de las ODM y la segunda Meta de la EPT referida a la Educación Primaria, varía desde factores exógenos referidos a la situación económica de las familias de los estudiantes, factores endógenos relacionados con los contextos escolares, los currículos y la preparación de los docentes, además de factores relacionados con las políticas educativas especialmente las relacionadas con el financiamiento educativo.
Respecto a Nicaragua, la tasa neta ajustada de matrícula entre 2010 y 2013 fue la siguiente: 2010 – 93.2 por ciento; 2011 – 94.8 por ciento; 2012 – 91.9 por ciento y 2013 – 91.2 por ciento. Como es posible observar, entre 2011 con el 94.8 por ciento de matrícula neta y el 2013 con el 91.2 por ciento, ha habido una abrupta caída, con especial énfasis en 22 de los 153 municipios del país.
Lo anterior presenta al país una gran paradoja, respecto al tipo de factores que pueden haber provocado esta situación y que solo la investigación científica debe determinar en cada caso, en tanto esta situación no se corresponde con los esfuerzos realizados por el Gobierno de la República con la apertura de nuevas escuelas; el incremento de la oferta de la educación inicial; la ampliación de escuelas con primarias completas y del número de plazas docentes para la Educación Primaria, y lo fundamental, el involucramiento masivo de la población y sus organizaciones en todo el país, en los eneros y febreros de cada año, para promover la matrícula y que ningún niño ni niña se quede sin estudiar.